lunes, 3 de octubre de 2011

Mesa #07. Jueves 07/04/2011 10:30

He decidido abortar.
Pero...
Aunque seas el padre, y mi marido ante la iglesia, creo que es una decisión mía. Lo he pensado mucho y no sabes lo que me aterra la idea de ir viéndome engordar cada día, notar cómo crece; ayer ya dio la primera patada, me dejó desconcertada y sobrecogida... ¿Y se se me muere dentro? Me preocupan las contracciones y los dolores del parto.
¡Pero no puedes abortar con seis meses!
Sí que puedo. Ya sé de un sitio que me lo hace y tengo cita para el martes de la semana que viene.
Espera, me estás diciendo que has pedido hora... ¿Y todo eso sin consultarme?
Pues claro, es mi cuerpo y hago con él lo que quiero. Y lo que no quiero ahora es sufrir para darte el simple capricho de poder hacerte padre.
No puedo creerlo...
Entiéndelo, no quiero seguir adelante con el embarazo. ¿Y si falla? ¿Y si me entran unos dolores horribles? Sabes que que soy muy miedica y muy sufridora.
Pero eso podemos ir superándolo, día a día. Además puedes pedir que te apliquen la epidural.
¿La epidural? ¿Y si sale mal y me quedo paralítica? ¿Y no has pensado que pasaría si el bebé nos nace deforme o retrasado mental? Seríamos el hazmereír del barrio...
¿Pensármelo? Sabes que a mí me gustaría tener hijos, siempre lo hemos hablado...
Sí, pero siempre podremos adoptar a una chinita o a un niño ruso. Eso es un acto humanitario, nada egoísta y muy alejado de tener que crear tus propios hijos. Además puedo llegar a entender que un día cedas tu semen para un vientre de alquiler. Pero no mi vientre; me niego, con lo que he pasado estos seis meses es más que suficiente.
No estoy de acuerdo.
Perdona pero te recuerdo que quien lleva ese... parásito dentro soy yo. Yo decido.
¿Parásito?
Mira, no lo voy a discutir más. Ya lo he pensado, y estoy más que convencida; el lunes me lo quito y no hay más que hablar.
No puedo creerlo. Es todo tan surrealista...
¡Oye, no te enfades! Eres un egoísta y deberías estar avergonzado. Encima que te tenía preparada una sorpresa para después del acontecimiento.
¿Egoísta? ¿Una sorpresa? ¿Acontecimiento?
Sí, una sorpresa para después del aborto. Es una especie de compensación por el disgustillo. Va, venga, adivina.
No puedo ni pensar, como para resolver acertijos...
¡Ay, qué tonto eres! Va, te lo cuento yo misma. Acabo de sacar unos billetes para irnos una semana de compras a Nueva York ¿A que es fantástico?

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